domingo, 20 de noviembre de 2016

EDITORIAL. Número 22. Agosto-septiembre 2016




Editorial
EN SEGURIDAD: CALIDAD, NO CANTIDAD

Los días y meses pasan, en aparente tranquilidad por los rumbos de la Unidad Tlatelolco. Cual fuera “temporada de lluvia”, aparece en el sueño –tal vez apacible- un suceso alterándolo, pocas veces conciliado placenteramente el descanso. Impera el despertar diario con terror.

El motivo, en las redes sociales reportan asaltos, intentos de robo de infantes, irrupción en departamentos para robo. Mención de quienes lo han vivido, de hechos presentes y pasados.

La incertidumbre afecta cualquier edad y género. Se establece que los ilícitos se dan en sitios obscuros y solitarios. O, solamente por la noche. Y la verdad no es así.

Sucede en lugares iluminados y obscuros. En pasillos transitados y solitarios; de día o de noche. Afectando a los llamados de la tercera edad, adultos, jóvenes y niños; hombres y mujeres.

La presente –editorial- no es el fomentar el miedo, ni alimentar la paranoia. Tampoco es caer en conclusiones de primera instancia de los hechos. Es, llamar la atención de las autoridades sobre la inseguridad manifiesta al interior y alrededor de Tlatelolco.

La inseguridad no es propia y única de este Conjunto Habitacional. También, de manera preocupante, está presente en las demás colonias de la Ciudad de México.

Las estadísticas oficiales reflejan una realidad inexistente. Donde muestran la baja de transgresiones en cada una de las categorías. El común de la población no lo cree, y consideran que están maquilladas. Y es la gran diferencia, de esa realidad estadística y la que se vive día a día en las calles de la ciudad capital.

Por otro lado, en algunos ciudadanos hace mella proposiciones alocadas de poseer arma; muy al estilo norteamericano. De aquella iniciativa de portación de arma y reforma del artículo 10 constitucional, del panista José Luis Preciado. Después modificó, en: tener armas en casa, auto y negocio.

Ojalá no lleguen a la desesperación quienes han sufrido un delito y de aquellos que por temor les suceda, acepten la iniciativa. “Para estar preparado”, dirán.

Los operativos policiacos como los han calificado, después de aplicarse genera el “fenómeno cucaracha”. El “insecticida”, pierde su efecto al poco tiempo, requiriéndose continuamente operativos.

La justicia y la seguridad, no está en manos de la ciudadanía. Por eso la puntualización y exigencia a las autoridades correspondientes de proporcionar tranquilidad y seguridad.

Tan breve y significativa palabra que no quisiéramos ver inmensa cantidad de policías, en cada operativo o en cualquier lugar apostados, como se tratara de la caza del “enemigo número uno”.

No se pide cantidad sino calidad y efectividad.



sábado, 19 de noviembre de 2016

PORTADA. CON Tlatelolco Número 22. Agosto-septiembre 2016


Homenaje a Irma Cosío

Como parte del Homenaje a Irma Cosío por su trayectoria artística y cultural,
dentro del marco de la puesta en escena de la Leyenda de la Llorona,
 se le entregó el Águila de Tlatelolco y un reconocimiento
de parte de las organizaciones participantes. Octubre 2016.


HOMENAJE A IRMA COSÍO

“Hasta la fecha, sigo recibiendo ¡¡¡los bueeeenos días!!! 

Así como las buenas vibras por el trabajo que inicié en 

una época como directora de Cultura en Tlatelolco”
Irma Cosío Mendoza



Irma Cosío y Paco Malgesto, en el programa 
de televisión: "Visitando las Estrellas".


Con el objeto común de rescatar los valores culturales y artísticos de la comunidad, la Organización Ciudadana Tlatelolca, A. C., TlatelolcoTV, Unidos por Tlatelolco, Con Tlatelolco, Tlatelolco Noticias, La Gira del Tostón, Somos CDMX, la Unión de Comerciantes Flores Magón-Tlatelolco, A. C., son los grandes promotores de la cohesión social e impulsores de la identidad y sentido de pertenencia.

Por su trayectoria artística y cultural. En el marco de la función de gala de la obra teatral “La Llorona”, el domingo 9 de octubre, en la Plaza de las Tres Culturas, las organizaciones ciudadanas rindieron un merecido homenaje a Irma Cosío Mendoza por sus actividades culturales para niños, jóvenes y adultos. En donde, ella físicamente estaba en el teatro del Club “Antonio Caso”, en la tercera sección.

Su estadía e inicios en Tlatelolco

En 1972, el delegado de la Cuauhtémoc la contrató como Coordinadora de Teatro en la Cuauhtémoc. Por otro lado, el director general de Administradora Inmobiliaria, S. A. (AISA), José Lima Zuno, “le gusto mi trabajo y quiso que compartiera el compromiso de la Delegación con Tlatelolco. Así fue como llegue aquí en octubre de dicho año”, expresó Irma Cosío.

Por ello, resaltó, “eso me motivó -con gusto enorme- a vivir en la Unidad, a raíz de la formación de la Subdelegación en Tlatelolco, en 1975”.

La maestra Irma Cosío, en su casa estudio, Tlatelolco.

Su experiencia profesional

Como actriz realizó unas setentas obras teatrales, trabajo en telenovelas con Fernando Vaine, en Telesistema Mexicano; con Pedro Ferriz Santacruz, en una serie de extraterrestre “Un Mundo nos Vigila”, teatro de revista, cine, asimismo, trabajó mucho con los cómicos como Clavillazo, Viruta y Capulina, entre otros.

“Mi vida en radio, trabajé en la XEW”, indicó, hizo radionovelas, episodios en “Kalimán, el hombre increíble” y fotonovelas.

Guillermo Rojas Olivo (el cuarto de izquierda derecha),
en la obra "Alicia en el país de las maravillas", montada por 

la maestra Irma Cosío. 1986. Fotografía cortesía GRO.


Formando el semillero

Tuvo mucha vida artística, pero llegó un día que necesitó enseñar lo que sabía. “Lo que había adquirido en la carrera, teórica y práctica”. Se fue retirando poco a poco del mundo del espectáculo y fundó una escuela de arte dramático, señaló Irma Cosío, “sin cobrar un centavo a los chamacos. De ahí nace todo este semillero”.

“Poco a poco, nos fuimos haciendo la idea de que tenía que surgir todo ese semillero, todo ese trabajo, tanto para Tlatelolco como para las colonias que se consideraban: Atlalpan, San Simón y Peralvillo”, precisó.

En los diversos espacios, agregó, “estábamos con nuestras actividades culturales y sociales. Así llegué a Tlatelolco”.

Recordó que “teníamos todas las promotoras voluntarias que nos ayudaban muchísimo con los niños. A los menores de edad los llevábamos a distintos actividades, por ejemplo, a sembrar arbolitos. Y como premio los llevábamos al Cine Tlatelolco y les dábamos una paleta helada”.

“Son recuerdos muy bonitos y muy hermosos. Ahora, esos niños son papás o abuelos, seguramente, se han de acordar de todas esas actividades”, apuntó.

Así es como nace la gente del teatro, que estuvo con ella, principalmente, el teatro del Club “Antonio Caso” y en Santo Domingo.

“Estoy muy agradecida con esos niños, jóvenes y con la gente de Tlatelolco que me apoyó tanto y que estuvo conmigo en todo momento. Además, a las autoridades de esa época que también me apoyaron, para poder enseñar”, exclamó.

Uno de tantos eventos organizados por la maestra Cosío,
en la Plaza de las Tres Culturas


El acercamiento con la gente

Se lograba todo esto, principalmente, por la confianza que se nos tenía. “Por lo riesgoso, por la seguridad, el sacar un niño de la escuela es dificilísimo. Ustedes saben que eso no es posible, sin embargo, le proporcionamos un espectáculo, por ejemplo, el Día del Niño, pues, queríamos a todos los niños de las primarias que vinieran a la Plaza de las Tres Culturas a disfrutar del espectáculo”, sostuvo.

“Claro, venían cuidados por sus maestros. No había deserciones escolares ni extravíos de infantes, nada de eso, los niños ahí estaban. Además venían uniformados y muy cuidados”, indicó.

Les presentó obras muy hermosas, “El Mago de Oz”, “Alicia en el País de las Maravillas en Patines”. Todos los viernes y sábados se presentaban diferentes obras teatrales.

En la época navideña, en las pastorelas, les traía elefantes, camellos, era increíble. La gente acudía y tenía confianza, porque sabía que estaba haciendo algo hermoso y algo bonito, un espectáculo, una actividad cultural.

Un lugar para expresarse

Irma Cosío: “teníamos un lugar para expresarnos culturalmente y para llevar nuestro mensaje de amor y fraternidad. En Tlatelolco, comunicando y expresando lo que éramos. Además, mostrando la labor con las personas de tres periodos de vida (niños, jóvenes y adultos)”.


lunes, 19 de septiembre de 2016

EDITORIAL. Número 21. Julio-agosto 2016




Editorial
SUFRAGIO EFECTIVO:
PARTICIPACIÓN CIUDADANA

La participación ciudadana institucionalizada se inicio desde que se creó el Departamento del Distrito Federal, en 1928, momento cuando la ciudad perdió sus municipios, la cual a través de los años se ha transformando.

Al modificarse y pronunciar el DDF, estaría integrada por diferentes sectores de la ciudad. Así mismo se fueron creando ley, reglamento y estatuto que la regirían.

En los 80’s la convocatoria para los “Jefes de Manzana” se realizaron en una época cuando la credibilidad -“bajo de popularidad”- hacia los partidos políticos estaba a la baja. Con ese hecho, la participación no fue para quienes estaban dentro del gobierno, sino del ciudadano común. Y ante la convocatoria para las elecciones, debidamente seleccionada por sectores y distritos.

En 1997, los ciudadanos eligieron por primera vez al Jefe de Gobierno de esta ciudad.

Es de esperar la intervención de los partidos políticos registrados -en la conformación de las planillas vecinales- por diversos intereses. Pese a ello, la ciudadanía busca participar de manera no institucionalizada, pero sí, independiente. Esto ha conllevado a una lucha de descalificaciones y dudas de su integridad política –como ente perteneciente a una sociedad- de los miembros de las fórmulas participantes.

No ha sido fácil. Poco a poco hace presencia la juventud y no por menoscabo de las personas adultas; al contrario, es la cualidad óptima de sumar experiencias y empuje, así como la participación proporcional de mujeres. Qué mejor motor para buscar y aplicar proyectos en beneficio de la comunidad.


A más de sesenta años de los ahora comités vecinales, falta mucho en lo legislativo y participativo, para considerar un avance democrático. El aventurar que cada evento es un producto acabado y definitivo sería mentir. Con la práctica, tiempo y madurez se podrán escalar niveles para evolucionar, a la par, con los tiempos políticos que se esté viviendo.

lunes, 12 de septiembre de 2016

EDITORIAL. Número 20. Mayo-junio 2016




Editorial
TLATELOLCO ES MÁS QUE ETIQUETAS

Estos meses han transcurrido digamos tranquilos. Aunque sigue pendiente lo del sistema de agua y la seguridad.

En el plano internacional, concretamente en los Estados Unidos, la contienda electoral está delineada con los candidatos a la presidencia de Hillary Clinton, por el partido demócrata y Donald Trump, por el republicano. El próximo mes de noviembre, se llevarán a cabo elecciones de trascendencia que auguran ser muy cerradas. Que, independientemente del resultado, las repercusiones económicas y políticas se reflejarán y, en especial, en los pueblos latinoamericanos, o para el llamado tercer mundo.

En la Ciudad de México, como ejercicios democráticos, estarán convocados para los próximos meses, el Presupuesto Participativo y los Comités Ciudadanos. Derecho que debemos ejercitar para ir haciendo costumbre y por ende, en su momento, con la madurez participativa refutar resultados anómalos con pruebas sólidas y argumentos. A la voz: “No hay, a cuál irle”, es en la medida de nuestra participación y argumentación concreta ante un posible fraude. Siendo así, es la manera de poder practicar nuestro derecho y presionar para que se acate los designios de la ciudadanía. Para que los ciudadanos y partidos políticos no se salgan por la tangente.

El Conjunto Habitacional Tlatelolco, está cargado de experiencias inolvidables de cada rincón y pasillos que lo conforman. Recuerdos y anécdotas enriquecen su historia. Está pleno de costumbres y eventos alentadores a la convivencia entre tlatelolcas, vecinos de otras colonias y por igual con gente visitante; nacional e internacional.

Ciudad Tlatelolco, enclavada en otra ciudad milenaria, no deja de estar exenta del entorno. Es una ciudad habitada por seres humanos que inevitablemente se mostrarán como tales, como entes de una sociedad. Que abruptamente se manifestarán desquiciamientos humanos.

Es por eso, al evitar información malsana, empezaremos a esclarecer que en la Unidad Tlatelolco –desde su fundación, 1964- se cultivan y representan actividades culturales, recreativas y artísticas. Se convive y expresa.

A Tlatelolco se le ha etiquetado como el ‘68 y el ’85. Pero quienes vivimos por estos lares sabemos que no es así.

Porque Tlatelolco es más que esas etiquetas… afortunadamente.



domingo, 21 de agosto de 2016

PORTADA. CON Tlatelolco Número 20. Mayo-junio 2016


EDITORIAL. Número 19. Abril-mayo 2016





HAY TLATELOLCAS PARA RATO

El pasado mes de junio se llevó a cabo el evento de Pachamama, un tributo a la Tierra Madre. La necesidad de voltear para ver el origen del ser humano, de las personas, de la gente que habita éste gran orbe, La Tierra.

Hemos maltratado e incluso negado el origen del llamado ser humano. Razón por el cual nos motiva a reflexionar sobre la ecología y la sociedad. ¿Qué parte o en qué cantidad el groso de la humanidad somos responsables del deterioro? La mayoría de los pobladores somos consumidores y en bien medida somos parte de esa culpa. De ahí la necesidad de exigir soluciones para no seguir afectando la naturaleza, nuestra vida, nuestra forma de ser.

Por otro lado, se expone la búsqueda de la hermandad y erradicación de las fronteras territoriales que nos ha afectado. No es sencillo porque es ancestral. Las economías y los intereses están entrelazados.

Con la separación de Gran Bretaña de la Unión Europea –el Brexit- contradice y enfatiza esas fronteras y por ende la economía a nivel mundial. La inmigración es un fenómeno, por igual, de siglos. El miedo al extraño, el desconocido, el odio genera xenofobia.

Parecerá que estos factores –que se dan en otro lugar del planeta- no nos afecta o e incluso es ilusorio. El orden económico cumple su cometido y determina la política a seguir en cada país, en cada región.

La Ciudad de México y Tlatelolco -en esencia los tlatelolcas- manifestaron, el pasado 5 de junio, su sentir en la elección del Constituyente. Se le achaca la poca afluencia a las urnas porque hubo poca propaganda impresa y multimedia. Situación, que a la fecha, los partidos políticos siguen creyendo que es la manera de influir en la ciudadanía, cuando siguen empecinados y más preocupados en hacer alianzas y pactos para ganar y no perder los escaños, más bien los recursos económicos. Se alejan de los ciudadanos.

Cuando cada partido político debe manifestar su ideología, arma su campaña política en cada elección, mostrando su verdadero interés: una solicitud de chamba. Y adiós ideologías.

Con el evento “La Importancia Histórica de los Tlatelolcas” -el viernes 24 de junio, organizado por varios grupos de la Unidad- demuestra que independientemente de sus creencias pueden coincidir, convivir. Algunas personas consideran que la población tlatelolca simpatiza por solo un partido político, lo cual es errónea dicha conclusión, este Conjunto Urbano, se ha caracterizado por ser pluralista.


Al final de dicho evento se hizo una emotiva porra a Tlatelolco. Con el “¡¡Tlatelolco!! ¡¡Tlatelolco!!… ¡¡rraaaa, rra, rraaaaa!!”. Quedó palpable que hay tlatelolcas para rato.